miércoles, 15 de junio de 2011

Nacimiento y niñez de Bolivar



Simón Bolivar Palacios nació el 24 de julio de 1783 en Caracas, Venezuela; hijo de una aristocráta y rica failia criolla, con grandes haciendas y esclavos. Fueron sus padres Don Juan Vicente Bolivar y Doña María de la Concepción Palacios, los cuales fallecieron cuando Simón Bolívar era aún un niño.



Simón Bolívar no tuvo una infacia feliz ni una educación sistemática. Sus primeros años de vida transcurrieron entre sucesos que marcaron su destino. A temprana edad quedó huérfano. Apenas murió María de la Concepción en 1792, sus hermanas se casaron, mientras que Juan Vicente y él quedaron bajo la tutela de Juan Félix Palacios y Blanco y Feliciano Palacios, respectivamente, Desde ese momento comenzó a residir en la casa de su abuelo. Pero al fallecer éste, en 1793, se nombró a Esteban Palacios (tío materno) como su tutor, quien al momento de la decisión se encontraba en España gestionando su ingreso en la Compañía de Reales Guardias de Corps. De tal modo que la Audiencia decidió designar a otro tío, Carlos Palacios, quien era el alférez mayor de la ciudad. La asignación de un tutor respondió fundamentalmente a la necesidad de administrar los cuantiosos bienes que habia heredado el joven.
 Bajo la custodia de Carlos, recibió mayor atención y cuidado de los esclavos debido a las frecuentes ausencias de su tío. Durante una larga temporada sus salidas se redujeron a la escuela pública, algunas caminatas con su maestro Simón Rodríguez, y a las visitas a la Cuadra Bolívar.


 En junio de 1795 el niño aprovechó la ausencia del tío y decidió irse a vivir con María Antonia. Ésta apoyó la decisión y acudió a la Real Audiencia, en la que alegó que en la ausencia de su tutor el niño debía ser cuidado por sus parientes más inmediatos y que además éste se resistía a volver a su antiguo domicilio.
 Las autoridades dictaminaron que debía permanecer en casa de su hermana. La medida fue apelada por Carlos, insistía en que se le inculcaba a su pupilo ideas poco adecuadas para su edad. Se inició un reñido juicio.
El jurado decidió a favor de Carlos, pero Simón se resistió y declaró ante los magistrados: " Ustedes pueden hacer con mis bienes lo que quieran, pero con mi persona no. Si los esclavos tienen libertad para elegir amos, a mi no me la pueden negar para vivir en la casa que me agrade ". 
Finalmente en agosto del mismo año acordaron llevar al joven a la casa de Simón Rodríguez, donde vivían familiares, criados y cinco alumnos internos. María Antonia solicitó que fuera trasladado al Colegio Seminario que se encontraba en Caracas.
 Simón estuvo en casa de Rodríguez apenas unos días. de allí también se fugó. Al día siguiente regresó en compañía de el sacerdote Juan Antonio de la Virgen Viana. La Real Audiencia dictó una resolución mediante la cual hizo comprometer al joven a comportarse de manera adecuada, respetar al maestro, asistir puntualmente a clases y cumplir con sus obligaciones. En octubre, después de varios meses de litigio, Simón expresó su deseo de volver con su tío Carlos. Al parecer esta decisión fue tomada para evitar ser enviado al Seminario.

En 1799, su familia lo envío a Europa a completar su educación. Allá estuvo tres años estudiando, viajando y disfrutando de la buena vida en los elevados círculos sociales y políticos, mayormente en Madrid.